En el ámbito jurídico, la traslación de la propiedad de bienes inmuebles es un proceso que está regulado por diversas figuras jurídicas, todas ellas contempladas en el Código Civil. Es crucial entender que todas estas figuras permiten transferir la propiedad de un bien inmueble a favor de una persona y que todas estas operaciones deben celebrarse ante un notario público. Aquí se explica la importancia y la obligatoriedad de la intervención del notario en estos procesos.
Pero ¿qué es un traslado de dominio?
La traslación de dominio en los bienes inmuebles es el proceso legal mediante el cual se transfiere la propiedad de un bien inmueble, como una casa, un departamento o un terreno, de una persona a otra, ya sea en un acto de compra-venta, de donación o de permuta, por mencionar los principales.
Este acto implica un cambio en el titular del derecho de propiedad y debe formalizarse mediante un contrato específico. Generalmente estos actos requieren la intervención de un notario público para asegurar su validez y legalidad conforme a lo establecido en el Código Civil Mexicano. Esta formalidad garantiza la protección de los derechos de las partes involucradas y la inscripción del nuevo propietario en el Registro Público de la Propiedad.
La obligación de formalizar ante notario
Uno podría preguntarse: si dos partes están de acuerdo en la venta y compra de un inmueble, ¿por qué es necesario hacerlo ante un notario público, especialmente considerando que los servicios notariales pueden ser costosos? La respuesta radica en el Código Civil, que establece la obligatoriedad de formalizar estos actos ante un notario para garantizar su validez y seguridad jurídica.
Figuras jurídicas cotidianas y su formalización
En nuestra vida cotidiana, celebramos contratos constantemente sin ser plenamente conscientes de ello. Por ejemplo, al comprar un refresco en una tienda, se detenta la posesión del refresco cuando se toma de la estantería. Sin embargo, la propiedad del refresco solo se transfiere cuando se paga en la caja. Este es un ejemplo sencillo de un contrato de compraventa verbal.
Asimismo, cuando alguien regala una botella de agua a otra persona, se está celebrando un contrato de donación. Y si esa persona luego intercambia la botella de agua por una lata de atún con alguien más, se está realizando una permuta. Estos ejemplos ilustran cómo las figuras jurídicas se aplican en transacciones diarias de manera sencilla.
Aplicación en bienes inmuebles
Lo mismo ocurre con los bienes inmuebles. La compraventa, donación o permuta de una casa, departamento o terreno puede realizarse de manera similar. Sin embargo, debido a la naturaleza y el valor de los bienes inmuebles, el Código Civil exige una formalidad adicional: la intervención del notario público. Esta formalidad asegura que la transacción se realice conforme a la ley, protegiendo así los derechos de todas las partes involucradas. La figura del notario público en México no es solo una tradición, sino una obligación legal que proporciona seguridad y certeza jurídica en la transmisión de bienes inmuebles. A través de su intervención, se garantiza que las transacciones se realicen de manera legal y transparente, protegiendo tanto a compradores como a vendedores y asegurando que los actos traslativos de dominio cumplan con los requisitos establecidos por el Código Civil.